A principios de enero de 2012, una de las noticias más alarmantes fue la denuncia de fuentes humanitarias de Pakistán sobre el asesinato de más de mil bebes por sus propias familias a causa de la pobreza.
Según la organización caritativa de Naciones Unidas, Edhi Foundation, en la última decada han aumentado en un 100% las muertes de bebes, en su mayoría niñas. En estos países las niñas representan una carga para la familia, pues deben pagar dotes para conseguirles matrimonio.
Los países de extrema pobreza pasan por este tipo de situaciones debido a la falta de recursos que tienen las familias para poder susbsitir. Sin embargo, es necesario hacer énfasis en que la solución no es la imposición de métodos de control natal ni la aprobación del aborto para solucionar los problemas económicos; como en el caso de la India, en dónde cada vez es más utilizado el aborto (sobre todo en bebes de sexo femenino).