.

Citarse con el cónyuge ayuda a reducir el divorcio

Un nuevo estudio publicado por The National Marriage Project de la Universidad de Virginia y dirigido por W. Bradford Wilcox y Jeffrey Dew, demuestra que los matrimonios que quedan para una cita solos, aunque sea una sola vez a la semana, ven reducido su riesgo de divorcio casi por la mitad.

El informe titulado The Date Night Oportunity: What does couple time tell us about the potential value of date nights? (en español La oportunidad de la cita de noche: ¿Qué nos dice el tiempo en pareja acerca del valor potencial de las citas de noche?) recogió datos de 1.600 parejas de 18 a 55 años, en 2010-2011, combinados con sondeos de 10.000 aultos, de 1987 a 1994.

Los sociologos sugieren al menos cinco formas en cómo las citas pueden fomentar matrimonios y relaciones más sólidas:

1) Mejoran la comunicación
Al poder hablar sin la distracción de los niños y el trabajo, la cita les permite hablar de las cosas que les importan y motivan: sus sueños, aspiraciones, también temores… Si hablan de sueños, pueden compartirlos, buscar objetivos comunes. Si hablan de problemas, lo hacen de forma constructiva y tranquila, proactiva, que es mejor que reaccionar por instinto y con prisas rodeado de niños o agobios.

2) Disfrutar de la novedad
Las parejas con años de relación tienden a “acomodarse” y perder la emoción. Los estudios demuestran que hacer juntos cosas novedosas (desde montar a caballo a pasear por la montaña, bailar o ver puestas de sol) borra la rutina, y une a los cónyuges en un reto compartido, divertido y emocionante.

3) Mejora la relación romántica y sexual
Las citas añaden creatividad y emoción, y al permitir el diálogo, puede ayudar también en este campo, animar a probar cosas nuevas, nuevos ambientes, etc…Todo ello fortalece el matrimonio.

4) Mejora el compromiso
Si hay al menos un día comprometido para “nuestra cita semanal”, queda claro que se marca una prioridad. Los abuelos que quedan cuidando a los niños, los amigos del trabajo que saben que el martes por la tarde “ellos quedan solos, no pueden venir a lo nuestro”… Todo refuerza la sensación de unidad y la importancia de trabajar por ella. Queda claro que para cada cónyuge, el otro es una prioridad.

5) Se aligera el estrés
Salir a divertirse en pareja, o meramente relajarse juntos, quita estrés, y eso es bueno para el matrimonio, siempre amenazado por enfermedades, problemas de dinero, broncas en el trabajo, etc… Permite ver al otro sin cargas de irritabilidad o cansancio o agobio, y eso ayuda a mantener el amor conyugal.

Dentro de las conclusiones identificadas por el estudio, se encontro que las parejas que dedican un tiempo específico por lo menos una vez por semana disfrutan de relaciones más estables y se ven menos afectadas por problemas como el divorcio, comparadas con otras parejas que no se dedican un tiempo mutuo.

Es necesario que las comunidades promuevan esta idea, puesto que la familia es la base de la sociedad y familias bien estructuradas fundadas en relaciones sólidas ayudan aumentar los valores de sus individuos.

Para leer el informe completo hacer clic aquí.

Fuente: Forumlibertas