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Disminuye tasa de fecundidad en Honduras

Al igual que ha ocurrido en varios países de la región, Honduras registra un descenso en su tasa de fecundidad pasando de 3.3 en 2005-2006 a 2.9 en 2011-2012.  Si se consideran datos anteriores, puede observarse que la Encuesta de Hogares del año 2001 mostró que las mujeres tenían en promedio 4.4 hijos, lo cual indica una clara tendencia a la baja.  Los datos del 2011-2012 vienen dados a conocer por la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (Endesa) 2011-2012, y destaca que la mayor parte de la disminución viene dada por el área rural ante un mayor uso de anticonceptivos.

Específicamente en la ciudad de San Pedro, la tasa de fecundidad está ya muy cerca del nivel de reemplazo situándose en 2.3 hijos por mujer.  El mayor uso de anticonceptivos, es consecuencia de que las mujeres deciden tener mejor hijos por factores como el desarrollo profesional, la inseguridad y crisis económica.

Los resultados de la Endesa señalan que la fecundidad varía según el nivel educativo de las mujeres (4.1 hijos en las mujeres que no tienen formación alguna, frente a 1.7 hijos por mujer en aquellas que han alcanzado un nivel superior de educación).  Este comportamiento es similar en todos los países, en parte porque por el hecho de continuar los estudios se retrasa el nacimiento del primer hijo.  Sin embargo, es importante cuidar que no se llegue a una mentalidad anti-natalista, donde los hijos se ven como un freno a la prosperidad y comodidad.  Al contrario, es importante promover la familia y facilitar la conciliación trabajo-familia para que las mujeres puedan estudiar y trabajar sin tener que dejar por un lado el aspecto familiar.

Algo que llama particularmente la atención de los resultados de Endesa 2011-2012 es que se reporta que los hombres aspiran a una familia más numerosa que las mujeres (3.3 frente a 2.8 hijos).  Es cierto que varias mujeres argumentarían que para el hombre es más fácil porque en ocasiones no nota el trabajo que suponen los hijos o no es él quien deja por un lado las aspiraciones personales.  Sin embargo, es importante revalorizar el trabajo de la familia y el hogar porque los hijos y una familia unida serán siempre la mayor fuente de felicidad si se saben integrar bien los roles de cada uno.  Además, al pasar de los años, será esta generación que no quiere tener hijos quien pagará la factura al verse limitada la capacidad de la familia a soportar la carga de los mayores ,  llegando entonces al problema del envejecimiento poblacional.

Para consultar los principales resultados de la Endesa 2011-2012 hacer click aquí.