El matrimonio como la unión esencial entre un hombre y una mujer es fundamental dentro de una relación estable, como origen de la familia y dentro de una sociedad por los innumerables beneficios que aporta a cada ser humano con vocación matrimonial, los mismos son nuevamente evidenciados en el informe recientemente publicado por el Centro de Investigación Pew.
El informe reúne los resultados obtenidos de una encuesta realizada a 9,000 estadounidenses unidos por matrimonio o por cohabitación respecto a cómo experimentan sus relaciones y las claras diferencias que representa el matrimonio en las mismas.
Para comenzar, llama la atención dentro de los resultados presentados, la reducción de la proporción de parejas unidos en cohabitación respecto a los que contraen matrimonio. Sin embargo, este índice en declive no se limita solamente a Estados Unidos, es una realidad en toda sociedad moderna; en Guatemala por ejemplo, la tasa de nupcialidad es de 4.9, en la Unión Europea es de 4.2 y en Estados Unidos es de 6.9 y se prevé que este índice continúe decreciendo en el futuro.
Aunque la mayoría de las respuestas reflejan una aceptación a la convivencia de pareja sin una unión matrimonial, una parte sustancial de los encuestados reconocen que el matrimonio representa un gran aporte a la sociedad, por lo que lo consideran imprescindible en relaciones a largo plazo.
La encuesta realizada demuestra muchos aspectos del matrimonio en una relación de pareja. Por ejemplo:
- Las relaciones matrimoniales reflejan mayores niveles de confianza entre los cónyuges respecto a fidelidad, honestidad y manejo de los bienes compartidos
- Los adultos dentro de un matrimonio expresan mayores niveles de satisfacción con su relación (58%) que los que solamente permanecen unidos por hecho (41%)
- Las personas encuestadas que se encuentran unidas por matrimonio, son más propensas, que los que solamente cohabitan, a sentir una mayor cercanía a su cónyuge que a cualquier otra persona en su vida
Otro aspecto a considerar, son las razones por las que las personas deciden unirse en cohabitación o en matrimonio; la mayoría de las personas encuestadas argumentaron que el amor y la compañía son lo primordial en su unión. Sin embargo, es interesante que una parte significativa de las personas unidas por hecho consideran otros factores al decidir vivir con su pareja, dichos factores están relacionados a las finanzas, a un mayor compromiso para con su pareja o como una comprobación de la funcionalidad de su relación previo a unirse en matrimonio.
La creación de una familia, es la finalidad de una unión matrimonial; aunque paradójicamente, el matrimonio es considerado actualmente menos necesario e imprescindible al pensar en un entorno familiar propicio para el crecimiento de los hijos, tal lo evidencia los resultados de la encuesta: más de la mitad de parejas que cohabitan educan a un menor y la mayoría de las personas encuestadas consideran que la unión matrimonial no es relevante en el desarrollo y educación de los hijos.
Los resultados de la encuesta muestran la actualidad del matrimonio en Estados Unidos pero se extienden a toda sociedad en la que el decrecimiento de los índices de nupcialidad, el aumento de la edad promedio de contraer matrimonio, la reducción de los hijos por familia, etc. son una clara realidad que influye significativamente en la composición familiar, en el desarrollo social y en cada ser humano en cada ámbito de su vida.