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Embarazo adolescente no puede considerarse problema de salud pública

El pasado mes de abril, el periódico colombiano El Tiempo dio a conocer un estudio realizado por la Universidad de La Sabana, dirigido por el profesor e investigador de dicha institución académica, Andrés Salazar.  El estudio revela que el embarazo de adolescentes no debe considerarse un problema de salud pública.

En un periodo de 5 años, estudiantes de medicina y de enfermería de la Universidad de la Sabana entrevistaron a 557 mujeres. El estudio denominado “Demografía y Salud 2011” demuestra que en Colombia el 19, 5% de las mujeres de 15 a 19 años ya son madres o están en embarazo.

Dichos datos son confirmados por la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDS 2010), que indicaron que una de cada cinco mujeres en este mismo grupo de edad ha estado alguna vez embarazada, 16 por ciento ya es madre y cuatro por ciento está esperando su primer hijo.

El estudio evaluó cinco criterios: estado civil, nivel académico, condición socioeconómica, número de hijos y si la joven tuvo que abandonar o no su proyecto de vida por quedar embarazada. Concluyó que el embarazo adolescente se magnifica como un gran fenómeno porque las mujeres de 20 a 24, de 25 a 29 y de 30 a 34 años han bajado el número de hijos que están teniendo; en promedio está entre dos y tres.

Salazar asegura que un problema de salud pública está relacionado con algún tipo de enfermedad, mientras que el embarazo es un estado de la mujer, por lo que depende del estrato socioeconómico en que se dé para calificarlo o no de problemático.

El embarazo, como asevera el director del estudio, no es una enfermedad y por lo tanto no debe darsele ese tratamiento.  Es necesario que el Ministerio de Salud Pública trate de disminuir las tasas de embarazos en las adolescentes, pero no por medio de la promoción del aborto o preservativos y anticonceptivos. Con dichos metodos parece que se busca aniquilar un virus, y no se atiende el fondo del problema. Es necesario promover la abstinencia y brindar educación sexual informada, pero sobre todo, formada en principios y valores.