.

La población europea en edad de trabajar comienza a disminuir

Europa ya comienza a ver las consecuencias del envejcimiento poblacional. Según el diario The Economist, la población en edad de trabajar de la UE (20-64 años) ha comenzado a disminuir en 2013.

Si no cambian las cifras de natalidad, en el año 2060 se reducirá de 308,2 millones hasta los 265 millones y con ello el número de personas mayores continuará aumentando. Esto elevará la tasa de dependencia de la tercera edad, del 28% en 2010 al 58% en 2060. Gracias a los inmigrantes, estos datos demográficos no son más evidentes.

Las mayores cifras de participación laboral, el descenso del paro y el crecimiento de la productividad pueden permitir que el empleo crezca un poco hasta la década de 2020; a partir de entonces se espera que disminuya. En 2012, la Comisión Europea proyectó un crecimiento económico de sólo el 1.4% al año en la UE, durante el próximo medio siglo.

La demografía adversa afectará a las finanzas públicas europeas. La Comisión prevé un alza en el gasto público en la UE, relacionado con la edad, de cuatro puntos porcentuales del PIB durante los próximos 50 años.

Las concecuencias de la baja natalidad ya son más que evidentes en los países desarrollados. La población activas es cada vez menor. Es necesario que estos países continúen tomando medidas para aumentar su población, dando oportunidades a las familias y así aumentar las tasas de fecundidad, sino cada vez la solución a este problema demogrico sera más lejano.

Fuente: Aceprensa