Recientemente la Directora Ejecutiva de ISDEMU (Instituto Salvadoreño de la Mujer) ha hecho unas declaraciones preocupantes para los salvadoreños que estamos pendientes de defender las leyes, comenzando por la Ley Fundamental como lo es la Constitución. La Constitución de El Salvador “reconoce como persona humana a todo ser humano desde el instante de la concepción.” según reza su Artículo 1.
La Directora Ejecutiva ha dicho en declaraciones en un foro internacional, comprometiéndose en nombre de El Salvador, a revisar los acuerdos tomados por el Estado en lo que se refiere a la práctica del aborto (así, sin eufemismos que eso es).
Si éticamente son reprobables dichas declaraciones, no lo son menos desde el punto de vista jurídico, pues esta funcionaria (de 6° o 7° Nivel, porque no está ni siquiera dentro de una Secretaría del Gobierno, sino que es una Directora Ejecutiva de una Institución, y a quien no llamo señora porque ella misma ha dicho que eso es discriminatorio siguiendo los vanguardismos de quienes proclamande la teoría del género); esta funcionaria, decíamos, se ha saltado el orden jurídico sin más ni más, pues el puesto que desempeña no le da derecho a “revisar” nada de lo que está en las leyes y mucho menos lo que está en la Constitución. Menos mal la sensatez ha prevalecido acá en El Salvador y por segunda vez el Presidente de la República (pues ya había habido otro altercado con ella por sus declaraciones) “la llamó al orden” y desestimó las declaraciones que había hecho en ese foro internacional, pues ella iba, no en representación del Gobierno de El Salvador, sino en representación de la institución de la que ella es Directora Ejecutiva.
El discurso que utiliza esta funcionaria está marcado por la teoría del género, de vanguardia; pero esperemos que se recuerde que el Estado de Derecho es algo que se debe respetar y que está por encima de opiniones, pareceres y vanguardias.