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¿Hacia un nuevo modelo de paternidad?

Una reciente publicación de la Revista Española de Investigaciones Sociológicas, analiza el cambio ocurrido en las últimas décadas en la forma como los padres viven la paternidad.  El aumento de la implicación paterna en el cuidado de los hijos es una realidad que atañe, no solo a la sociedad española, sino en general a otros países.  La publicación mencionada busca analizar esa implicación paterna explorando las opiniones de padres españoles en distinta situación (unidos en matrimonio, padres separados, padres en situación de paro laboral, entre otros aspectos).

Entre los principales resultados destaca el proceso de transición de la paternidad que, no sin contradicciones, hace evolucionar la paternidad tradicional homogénea hacia una concepción compleja y multidimensional de la misma, permitiendo distinguir entre el «proveedor económico» y el «padre».

Entre los resultados del estudio pueden mencionarse diferentes sentimientos y percepciones entre los padres, por ejemplo:

  • Hay un grupo de  padres “fatigados” que ademas de su rol de proveedor asumen parte de las atenciones a los hijos, aunque sea como actor secundario,  sin grata valoración. Sostienen que las tareas con los hijos «cansan», «saturan», «fatigan».
  • Se tienen padres que al ya no estar en una relación estable con la madre de sus hijos, consideran que tienen un “déficit” de paternidad:  el reparto del tiempo de los hijos reduce los espacios de generación de vínculo afectivo y la comunicación con los hijos
  • Entre los padres en situación de paro laboral, la concepción del ejercicio de la paternidad emerge y se configura como un elemento de compensación ante la falta de trabajo en que viven, siendo conscientes que dejan a la familia en una situación más vulnerable y no dejando de cargar con un sentimiento “de inutilidad que llega a generar vergüenza ante las preguntas de los hijos sobre la situación laboral.”

El estudio expone que “diferentes trabajos señalan desde hace décadas el proceso de transformación en el que está inmersa la institución paterna. Estudios recientes indican un aumento del tiempo de atención de los padres a los hijos en España, particularmente a partir de la crisis económica. Precisan que este incremento se produce tanto en tareas rutinarias de atención y acompañamiento de los hijos como en actividades educativas y lúdicas”.

Esta realidad de una mayor implicación del padre en la crianza de los hijos es sin duda algo positivo.  Es importante que el padre sepa la importancia de su rol y como el mayor involucramiento en el cuidado de los hijos no implica una “materialización” de su forma de ser.  El padre es en la familia un balance a la labor de la madre, su masculinidad es importante para el desarrollo óptimo del hijo.

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