El 27 y 28 de abril se ha celebrado en el Parlamento Europeo en Bruselas la II Cumbre Transatlántica de la Red Política por los Valores (Political Network for Values), que reunió a eurodiputados, legisladores de América del Norte, América Central, América del Sur y África, así como a expertos en diversas áreas, en torno a temas clave de dignidad y vida humana, familia y sociedad, libertad de conciencia y libertad religiosa.
Durante la Cumbre se reflexionó sobre diversos aspectos del escenario mundial, abordando temas tan relevantes como la resolución del Parlamento Europeo sobre la masacre sistemática de minorías religiosas, ejemplos positivos de políticas públicas para fortalecer la familia, la aplicación de cuidados paliativos para atender a las personas con enfermedades terminales o la protección de la vida de los más vulnerables.
Se generó un muy rico espacio para el intercambio de opiniones y experiencias sobre el trabajo que se puede hacer a favor de los derechos humanos en diversas instancias internacionales como son la Unión Europea, la ONU y la OEA, tomando en cuenta el rol clave que desempeña la familia para el desarrollo sustentable de las naciones, así como los derechos fundamentales a la vida, a la libertad de conciencia y a la libertad religiosa.
Participaron en la sesión de apertura Marian-Jean Marinescu (Vicepresidente del Grupo EPP en el Parlamento Europeo), Jaime Mayor Oreja (Presidente de la Red Política por los Valores) y Laima Andrikiene (Eurodiputada). La Cumbre contó también como invitado especial con Su Excelencia Mons. Gintaras Grusas, Arzobispo de Vilna (Lituania) quien fue el ponente durante la cena recepción del jueves 27.
El contexto y objetivos de la Cumbre se sintetizan en las palabras de Jaime Mayor Oreja, presidente de la Red: “La sociedad líquida, como los fluidos, va socavando sus propios cimientos, sus principios y valores. El pensamiento débil arrasa y lo políticamente correcto exige una policía del pensamiento para deslegitimar y marginar a los heterodoxos. Pero nosotros no queremos ser arrastrados ni por el Nuevo Orden Mundial ni por el extremismo reactivo”. Se trata de ofrecer una respuesta desde los valores del legado greco-latino judeo-cristiano de la cultura occidental.
Esta Red política comparte un decálogo de valores y compromisos por la dignidad humana y el bien común que incluyen, entre otros, el derecho a vida como el primero de los derechos humanos, sin el cual los demás derechos pierden su cimiento; la familia como la unidad básica de la sociedad, primera escuela de formación del carácter y los valores que moldean al individuo y lo preparan para el desempeño de un rol positivo en la sociedad; el matrimonio como una institución donde el hombre y la mujer tienen un aporte diferente y al mismo tiempo complementario en el proceso de formación de una familia; el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos de acuerdo con sus convicciones morales, religiosas, filosóficas y pedagógicas; el significado de los deberes frente a la ideología del relativismo, en la que se amplía la enumeración de falsos y supuestos nuevos derechos que significan la supresión de los deberes, bien sea con las personas mayores, con los niños, o con los seres humanos no nacidos; o la defensa de la libertad religiosa como un elemento central de la dignidad humana.
En el marco de la Cumbre se realizó un programa especial para jóvenes líderes que aspiran asumir la responsabilidad por el futuro desde la promoción de la dignidad humana y el bien común y que se comprometen a ejercer un liderazgo entendido como servicio. Participaron en el programa jóvenes de Colombia, México, Ecuador, España y Estados Unidos.
Comunicado oficial de Political Network for Values