El 5 de noviembre se presentó en Madrid el Informe The Familiy Watch 2009 que demuestra la pérdida del bienestar personal de padres e hijos y el alto coste social que implican las rupturas matrimoniales.  El estudio se basa en datos de 115 estudios internacionales y presenta datos de la evolución de los matrimonios, haciendo ver las consecuencias de la ruptura familiar en los hijos y en la sociedad en general.

Los estudios dan a conocer efectos positivos de la estabilidad familiar para los padres como por ejemplo una mayor esperanza de vida y menor riesgo de enfermedades mentales, alcoholismo y violencia doméstica. También hay efectos positivos en los hijos como menor probabilidad de caer en las drogas y la delincuencia en la pubertad, mejores resultados académicos y menos enfermedades mentales, entre otros.

También se mencionan efectos económicos ya que la estabilidad familiar tiene un menor costo para los integrantes de la familia y toda la comunidad.  “Existen estudios detallados de distintos países europeos que cifran el coste de las rupturas familiares en varios miles de millones de euros, teniendo en cuenta las prestaciones sociales, seguridad social, acogida de menores, etc.”

El Informe hace algunas propuestas para diseñar las políticas familiares: que se promuevan iniciativas que prevengan las crisis familiares, en lugar de facilitar la ruptura; y que se revise el marco legal del matrimonio civil en España, para reforzar la situación de los cónyuges que aspiran a construir una relación estable.