
El artículo afirma que “Los resultados muestran que los padres varones realizan una contribución al bienestar de sus hijos que resulta adicional y complementaria a la de la madre. En casi todos los casos, el capital social y humano de las madres y de los padres se suman, lo que permite afirmar que es mejor tener dos padres que sólo uno de ellos. En algunos casos, los hijos adolescentes se beneficiaron de que al menos uno de sus padres tuviera una conducta ejemplar —o se vieron perjudicados si ocurría lo contrario.”
Lo anterior es de suma importancia sobre todo porque hoy en dia no puede ignorarse el hecho que gran cantidad de niños crecen en hogares monoparentales. Tampoco puede olvidarse que muchos niños viven con varias generaciones de su familia, con una pareja de hecho u otros modelos de “familia”, lo que plantea si necesitan que les eduquen sus padres biológicos para desarrollarse de forma óptima o si puede hacerlo cualquier adulto con la misma eficacia, sea cual sea su sexo y situación” De cualquier forma es importante continuar las investigaciones en esta línea y sobre todo que los padres hagan un esfuerzo por dar a sus hijos lo mejor que pueden darles: un hogar estable en el que tanto la madre y el padre están presentes para el hijo. Por último, que el Estado, la comunidad y los Centros Educativos tomen en cuenta estas investigaciones para descubrir la mejor forma de llenar esos vacíos con los que muchos niños y jóvenes crecen.
Para conocer la investigación hacer clic aquí.