En numerosas ocasiones la paternidad se ha visto como un obstáculo en el campo laboral. Sin embargo, un nuevo estudio ha llegado a la conclusión de que los progenitores con más de dos hijos son más productivos que los que no tienen ni un solo hijo.
El informe denominado “Parenthood and Productivity of High Skilled Labor” (Paternidad y productividad de un alto nivel de trabajo) realizado por el Banco Federal de Saint Louis en Estados Unidos indica que ser padres aumenta la productividad. Sin embargo, para las madres solteras el efecto del embarazo es negativo, así como para hombres sin un puesto fijo.
El estudio fue realizado con más de 30,000 economistas, a quienes se les midió la productividad. Los resultados indicaron que las madres eran más productivas que las mujeres sin hijos en casi todos los períodos. La productividad llega además de forma exponencial: las mujeres más productivas eran las que tenían dos hijos o más. La diferencia más significativa ocurre en los primeros cinco años de trayectoria laboral.
El estudio apunta, eso sí, a que la mayor productividad de una mujer con hijos ocurre justo antes de dar a luz o mucho después de que sus hijos hayan nacido: en momentos puntuales, como cuando los niños son pequeños, la productividad es de un 15 a un 17% menor que una mujer sin hijos. Además, aquellas que son madres por debajo de los 30 años ven un efecto negativo en su trabajo.
Para los hombres, la paternidad tambien es positiva: aunque no hay diferencia entre quienes tienen un hijo y los que no tienen, sí las hay para los que tienen más de un hijo.
Los resultados de este estudio son positivos para la familia. Es necesario que la sociedad continúe apostando por esta institución humana y que las empresas colaboren en fomentarla. Muchas veces se ha visto la paternidad como algo negativo para el crecimiento y la realización personal. Sin embargo, este tipo de estudios refleja que la familia es, y seguirá siendo, beneficiosa para la sociedad en general.