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ONU: Estado de la Población Mundial 2009

magazine_img_234_0El 19 de noviembre el Fondo de Población de la ONU (UNFPA, por sus siglas en inglés) publicó su Informe sobre el Estado de la Población Mundial 2009. El informe se titula Frente a un mundo cambiante: las mujeres, la población y el clima y establece relaciones entre la agenda de derechos reproductivos, el desarrollo sustentable y el cambio climático.

El informe aclara que no puede decirse que el tamaño de la población sea la causa del cambio climático, aunque afirma que si se reduce su crecimiento, se reducirán las emisiones de gases contaminantes. Ante lo anterior sugieren la planificación familiar y la salud reproductiva. Sin embargo, puede afirmarse que dichas medidas seguramente no son la solución sino que únicamente empeorarían la ya triste situación demográfica de envejecimiento que está enfrentando la población mundial.

A continuación reproducimos un artículo del Catholic Family & Human Rights Institute que consideramos que tiene excelentes comentarios.

Con tono alarmante, el UNFPA señala: «las duras realidades del alto nivel de emisiones per cápita en los países industrializados y del acelerado aumento de las emisiones en los países en desarrollo destacan la urgencia de movilizar a la humanidad entera para frenar colectivamente esas tendencias, ahora que estamos al borde de un posible desastre climático». En una declaración que acompaña al informe, la Directora Ejecutiva del Fondo de Población, Thoraya Obaid, asegura que «el acelerado crecimiento de la población y la industrialización han conducido a un rápido aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Hemos llegado ya al punto en el que la humanidad se acerca al borde del desastre»

Peter C. Smith, de la International Right to Life Federation, advierte que las agencias como el Fondo de Población siempre necesitan de un «desastre inminente» para asegurar su financiamiento. Smith considera que el «verdadero desastre inminente» es «la implosión demográfica del mundo desarrollado» que se está exportando al mundo en vías de desarrollo. El informe proclama y califica como positivas las disminuciones en el índice de nacimientos en Japón y la Unión Europea, a la vez que critica el aumento de la fertilidad en los Estados Unidos.

En algunos pasajes, el informe rechaza los argumentos abiertos sobre control de la población y reconoce a especialistas en desarrollo como el bangladeshí Atiq Rahman, quien atribuye el cambio climático a «patrones de consumo» más que a «cuestiones demográficas». No obstante, el informe también afirma que «[c]ada alumbramiento produce no sólo las emisiones atribuibles a esa persona durante el transcurso de su vida, sino también las emisiones de todos sus descendientes. En consecuencia, la reducción de emisiones cuando los alumbramientos son deseados o planificados se multiplica a lo largo del tiempo».

Además, afirma que «ha sido el temor de las apariencias de apoyar el control de la población lo que ha frenado hasta hace poco toda mención de “población” en el debate sobre el clima. No obstante, algunos participantes en el debate están sugiriendo tentativamente la necesidad de considerar al menos los efectos del crecimiento de la población». Se hace referencia a la propuesta de la Unión Europea de «incluir las tendencias de la población entre los factores que han de tenerse en cuenta cuando se fijan metas para la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero».

Los críticos también apuntan al modo positivo en el que el informe se refiere al principal asesor de ciencia de la administración Obama, John Holdren, ya que se muestra favorable a las medidas coercitivas. En los años setenta, Holden hizo un llamamiento al aborto forzoso y a la esterilización en sus escritos.

La inquietud sobre el papel del Fondo de Población en la aplicación de la política china de un solo hijo, la cual está plagada de alegatos de abortos forzados y en función del sexo, contribuyó a que el Departamento de Estado de los Estados Unidos, en ese entonces al mando del Secretario de Estado Colin Powell, suspendiera el financiamiento de la agencia. En marzo de este año, la administración Obama revocó la política de la administración Bush y ordenó que se destinaran 50 millones de dólares al Fondo de Población, a pesar de las dudas sobre su papel en la China.