.

Rompiendo barreras: Techo de Cristal y Cemento

Actualmente las mujeres enfrentamos dos grandes desafíos en el ámbito laboral: el techo de cristal y el techo de cemento. El primero hace énfasis en los factores externos, como estereotipos y desigualdades entre el sexo femenino y masculino; el segundo, en elementos internos, tales como auto-percepción y falta de confianza en nosotras mismas. En el presente texto analizaremos ambos.

El techo de cristal

El techo de cristal hace referencia a las oportunidades limitadas que tenemos las mujeres en el ámbito laboral; Un obstáculo para el género femenino ascender en puestos de trabajo y aspiraciones profesionales, que nos impide avanzar y crecer en nuestra carrera laboral y académica.

  “Se denomina así a una superficie superior invisible en la carrera laboral de las mujeres, difícil de traspasar, que nos impide seguir avanzando. Su carácter de invisibilidad viene dado por el hecho de que no existen leyes ni dispositivos sociales establecidos, ni códigos visibles, que impongan a las mujeres semejante limitación, sino que está construido sobre la base de otros rasgos que por su invisibilidad son difíciles de detectar”

Realidad de las mujeres en Guatemala

Es evidente que se han logrado grandes avances en cuanto a oportunidades de equidad para las mujeres en Guatemala; Actualmente existen leyes dentro del marco constitucional, como los artículos 1,2 y 4 de la Constitución Política de la República de Guatemala, que protegen a la persona, a la familia y a el deber de brindar libertad, justicia e igualdad en derechos, tanto a  hombres como a mujeres. Por otro lado, también subsisten políticas públicas de género como la Política Nacional de Promoción y Desarrollo Integral de las Mujeres PNPDIM y PEO 2008-2023, propuesta por la Secretaria Presidencial de la Mujer. Así mismo,  los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Presentados por las Naciones Unidas y ratificadas por los países miembros, y alineados al Plan Nacional de Desarrollo K’atun: Nuestra Guatemala 2032, entre otros marcos y tratados internacionales y políticas, consejos y leyes locales, que sirven como instrumentos para el desarrollo integral de las mujeres en las distintas esferas de la vida social, económica, política y cultural.  

No obstante, ¿Por qué aún marcos internacionales y locales, siguen existiendo complicaciones para que las mujeres podamos optar a puestos en el sector público?

Claro, es que hace falta mayor planificación y monitoreo para llevar acabo las distintas políticas propuestas; se requieren mayores esfuerzos para eliminar todo tipo de discriminación hacia la mujer, es necesario fortalecer un sistema de justicia, de las instituciones, del ejercicio democrático participativo, de la construcción de agendas nacionales o estrategias de oportunidades, de políticas públicas incluyentes de mujeres en ámbito económico, político y laboral, de formación política con enfoque en la participación ciudadana, de mejoramientos al sistema electoral y de gobierno, con propuestas de equidad.  Deben seguir los intentos de reformar los mecanismos actuales de trabajo y ocupación, tanto del sector privado como en el público, para procurar equidad entre mujeres y hombres.

Consecuentemente, también es indudable un cambio conductual cultural. Fomentar un cambio de conductas y comportamientos es indispensable para que tanto hombres y mujeres deseen participar como entes de cambio, que logren visualizar un panorama distinto de oportunidades de crecimiento, y les permita aspirar a un horizonte más amplio.

Esto se logrará a través de una serie de procesos que  involucran a todos los ciudadanos: actividades de prevención y control de la violencia, avances para lograr mayor conocimiento y cumplimiento de derechos y obligaciones, mejorar la capacidad para concertar acuerdos y dar solución pacífica a los conflictos entre ciudadanos, para finalmente mejorar la capacidad de comunicación y participación ciudadana, con mayor inclusión de todos.

Los gobiernos, dentro de sus competencias democráticas, siguen trayendo a la mesa propuestas de cambio para una equidad, y aunque sigue siendo de interés colectivo y contenga intención de un cambio real, generalmente son utilizadas como estrategias de campaña. Por lo tanto, el verdadero cambio viene de cada uno, de conductas y comportamientos, el cuál a través de un proceso de socialización integral y cultural, promoverá el cambio poco a poco.

Sin embargo, existe otro reto aun más grande, y es él auto-impuesto por las propias mujeres, el techo de cemento.

El techo de cemento

Una de las muchas investigaciones realizadas por Nuria Chinchilla, del IESE Business School, hace referencia al concepto llamado techo de cemento, el cual define como “los auto-impuestos de la propia mujer. Todas aquellas barreras internas que tienen que ver con la falta de confianza o con el miedo al fracaso”. Las mujeres encontramos obstáculos culpándonos a nosotras mismas, ya sea por la falta de confianza, autocrítica y/o la propia percepción de auto limitarnos. Visualizamos un alto coste personal y familiar, que impide una lucha por el crecimiento académico y profesional. Por lo que en definitiva es necesario dejar atrás los estereotipos y comenzar a perder el miedo al fracaso.

Superar los obstáculos internos y externos es un reto para todas. Es crucial un cambio de mentalidad y empoderamiento. Por lo tanto, Nuria brinda tres consejos para romper el techo de cristal y de cemento:

  • Descubrir la misión única e irrepetible que tiene cada una.
  • Aprender a organizar bien la agenda según prioridades.
  • Tener la mente y el cuerpo alineados, lo que nos permitirá tomar decisiones más correctas, acertadas y sostenibles en el tiempo.

Por último un consejo de Dolores Dancausa, uno de los grandes ejemplos de crecimiento y empoderamiento de la mujer:

 “Siempre surgirán dudas y habrá renuncias que hacer por el camino, de ahí que sea vital poner el foco en lo importante. Por ejemplo, a la hora de conciliar vida profesional y personal, hay que ir sorteando momentos y pasando malas rachas, confiando en que los hijos vean que tu esfuerzo da frutos positivos. Tienes que implantar cierto blindaje para que se dé el equilibrio necesario entre todas las facetas de tu vida”

 ¡Es hora de comenzar a romper el techo de cristal y de cemento! Dejar de limitar las oportunidades. Porque el crecer de manera personal nos hará crecer en todos los ámbitos de nuestra vida, e impactará positivamente en la sociedad.

 

 

———————–

Fuentes consultadas:

Mockus, A. (2001)  Cultura ciudadana, programa  contra la violencia en Santa Fé de Bogotá, Colombia, 1995-1997.  Banco Interamericano de Desarrollo. Recuperado de: http://services.iadb.org/wmsfiles/products/Publications/353306.pdf

SEPREM, Secretaria presidencial de la Mujer. Manual del clasificador presupuestario con enfoque de género con base en la PNPDIM y PEO 2008-2023 recuperado de http://seprem.gob.gt/wp-content/uploads/Manual_CPEG_-digital-1.pdf

Centro de Estudios de Guatemala (2007). Avances y desafíos de las mujeres en Centroamérica. Un repaso regional sobre 4 aspectos: Participación Política, Educación, Salud y Autonomía Económica. Recuperado de http://www.ceg.org.gt/images/documentos/publicaciones/Avances%20y%20desafios%20de%20las%20mujeres%20en%20CA.pdf

 Chinchilla, N. (2012) ¿Techo de cristal o de techo de cemento? IESE Bussness School . Recuperado de: https://blog.iese.edu/nuriachinchilla/2012/12/techo-de-cristal-o-de-techo-de-cemento/

 Chinchilla, N. (2017). Rompiendo techos de cemento y de cristal. IESE Business School Recuperado de: https://blog.iese.edu/nuriachinchilla/2017/05/rompiendo-techos-de-cemento-y-de-cristal/

 Chinchilla, N. (2016). Cabeza y corazón en sintonía. IESE Buisness School  Recuperado de: https://blog.iese.edu/nuriachinchilla/2016/09/cabeza-y-corazon-en-sintonia-y-florecera-tu-talento/